¿Cómo WHOOP mide el sueño y qué tan preciso es?
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Entonces, ¿qué tan preciso es WHOOP?
Después de más de dos años de investigación y validación utilizando los datos de polisomnografía de monitoreo del sueño (PSG) de la Universidad Central de Queensland y la Universidad de Arizona, WHOOP es aún mejor en la medición de las etapas del sueño (vigilia, ligero,, REM y profundo), por lo que tus datos reflejan mejor cómo descansas y te recuperas. Esto es lo que puedes esperar:
- Etapas del sueño más precisas: La precisión de la clasificación en las cuatro etapas del sueño ha mejorado en más del 7 %, según las pruebas internas de WHOOP, lo que genera información más precisa sobre cuánto tiempo pasas en cada etapa del sueño.
- Detección mejorada de sueño/vigilia: La capacidad de detectar el estado de vigilia ha mejorado en más de un 3 % gracias a las pruebas internas de WHOOP. Esto significa que los datos de tu sueño reflejan con mayor precisión tu descanso, teniendo en cuenta específicamente los periodos cortos de vigilia, como cuando te mueves durante la noche.
También se han realizado estudios adicionales de terceros que demuestran que WHOOP tiene una precisión suprema:
- Este estudio de la Universidad Central de Queensland descubrió que WHOOP tiene una precisión del 99.7 % al medir la frecuencia cardíaca y del 99 % al medir la variabilidad de la frecuencia cardíaca durante el sueño, que son niveles de precisión que superaron a todos los demás wearables del estudio.
- El mismo estudio de esta universidad también descubrió que WHOOP era excelente para identificar el sueño en comparación con la polisomnografía (PSG) —el estándar de oro—, y superó a los otros dispositivos en el cálculo del tiempo total dormido.
- Otro estudio sobre los principales wearables que se llevan en la muñeca reveló que WHOOP fue el más preciso en varias categorías en comparación con el estándar de oro PSG.
Este nivel de precisión significa que puedes confiar en WHOOP para obtener información sobre el sueño que te ayude a dormir mejor, ya sea ajustando tu hora de acostarte, mejorando la eficiencia del sueño y más.
WHOOP fue hecho para el sueño
WHOOP fue diseñado desde cero para proporcionar el monitoreo del sueño más preciso posible. Recopilamos cientos de puntos de datos por segundo de nuestro acelerómetro de 3 ejes, giroscopio de 3 ejes y sensor PPG.
La PPG, o fotopletismografía, es una técnica que implica medir el flujo sanguíneo evaluando cambios sutiles en el volumen sanguíneo en los capilares cercanos a la piel.
En un estudio del sueño PSG, las personas se someten a registros simultáneos de electrocardiograma (EKG), electrooculograma (EOG), electroencefalograma (EEG) y electromiograma (EMG). Posteriormente, técnicos capacitados interpretan estos resultados y clasifican intervalos de 30 segundos de datos (llamados época) en una de cuatro etapas del sueño: vigilia, ligero, REM y ondas lentas. Si bien la PSG es el estándar de oro y la forma más precisa conocida para determinar las etapas del sueño, también es costosa, difícil e intrusiva. WHOOP utilizó estos datos de PSG y de WHOOP para entrenar modelos de aprendizaje automático a fin de identificar con precisión las diferentes etapas del sueño.
Si alguna vez te has preguntado qué son las pequeñas luces verdes en la parte inferior de tu WHOOP, son una parte muy importante de la PPG. Entre las dos luces verdes hay un pequeño fotorreceptor que mide la luz. Cuando se proyectan colores específicos (longitudes de onda) de luz sobre la piel, se puede medir el volumen de sangre observando la luz que refleja la piel, ya que la sangre absorbe colores específicos y refleja otros. Una vez que se mide el flujo sanguíneo, podemos derivar la frecuencia cardíaca, la variabilidad de la frecuencia cardíaca y la frecuencia respiratoria, todas las cuales se utilizan en nuestros algoritmos de etapas del sueño.
¿Por qué es tan importante dormir?
Monitorear y analizar el sueño es fundamental para la salud general. A pesar de su importancia, conseguir un sueño saludable es más difícil que nunca. Datos de una encuesta de Gallup muestran que los estadounidenses actualmente duermen en promedio más de una hora menos por noche que hace 70 años. La actual epidemia de falta de sueño aumenta nuestro riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, cáncer, y obesidad, e incluso acorta nuestra esperanza de vida.